LIFTING FACIAL

El Lifting Cervico-Facial, también conocido como ritidectomía, es un procedimiento quirúrgico diseñado para mejorar los signos visibles del envejecimiento en la cara y el cuello. A medida que envejecemos, la piel y los músculos faciales pierden tonicidad, apareciendo arrugas y descolgamiento de los tejidos. Aunque el lifting facial no detiene el envejecimiento, puede mejorar significativamente estos signos mediante el tensado de estructuras profundas, redistribución de la piel y eliminación del exceso de grasa.
Evaluación Preoperatoria
Durante la consulta, el Dr. Roberto Prado evaluará las características faciales y los problemas a corregir, así como tu estado de salud general. Te proporcionará instrucciones específicas para prepararte para la cirugía.
Proceso Quirúrgico
El lifting cervico-facial se realiza en un quirófano y dura aproximadamente de 2 a 3 horas, bajo anestesia local con sedación o anestesia general. Tras la cirugía, se coloca un pequeño drenaje detrás de la oreja, que se retira en 1 o 2 días, y un vendaje ligero, que se retira al día siguiente.
Recuperación y Cuidados Postoperatorios
Después de la cirugía, es normal experimentar inflamación y moretones durante 2 a 3 semanas. Es crucial mantener reposo relativo durante la primera semana y descansar con la cabeza elevada. Evita el ejercicio físico durante aproximadamente un mes y no te expongas al sol hasta que los moretones desaparezcan por completo. La mayoría de los pacientes pueden volver al trabajo en 10 a 15 días.
Resultados y Beneficios
Los resultados del lifting cervico-facial se aprecian plenamente después de que desaparezca la inflamación y finalice la cicatrización. Aunque el envejecimiento continúa, el lifting proporciona un aspecto más joven y ralentiza los signos del envejecimiento.
Si buscas rejuvenecer tu apariencia en Santiago, el Dr. Roberto Prado ofrece una evaluación personalizada y un enfoque experto. Agenda tu consulta hoy mismo y descubre cómo el lifting cervico-facial puede transformar tu apariencia.